Martes 6 de marzo de 2018
Este año la Iglesia que peregrina en Chile lo dedicará a contemplar a Jesucristo, que en la Eucaristía entrega su vida por amor al Padre y a cada uno de nosotros. La Eucaristía es la fuente de la comunión con Cristo, pan de vida, que transforma la vida e impulsa a salir al encuentro de los demás.
Durante este año queremos profundizar en los aspectos centrales de la Eucaristía, renovar y embellecer nuestras celebraciones y descubrir la íntima relación que hay entre Eucaristía y vida cristiana. Como decía San Alberto Hurtado, queremos descubrir que la vida cristiana consiste en hacer de nuestra existencia una Eucaristía que se celebra en comunidad y se vive en la solidaridad, la fraternidad y en el compromiso por la transformación de nuestro país en hogar para todos.
Durante la tarde del lunes 5 de marzo, luego de la reunión habitual de la Comisión Organizadora en dependencias de la Conferencia Episcopal, se dieron a conocer el lema y logo del Congreso Eucarístico Nacional.
El lema: ¿Qué haría Cristo en mi lugar?
El lema está inspirado en la vivencia de San Alberto Hurtado en relación a la Eucaristía, que nos recuerda que cuando nos disponemos para entrar profundamente en el Misterio de la Eucaristía el Señor nos configura con Él y nos envía a continuar su misión en el mundo.
La frase, escrita con los colores de la bandera chilena, nos invita a centrar la mirada en Cristo. Se trata de disponernos durante este año para encontrarnos con Él en forma personal y comunitaria para conocerlo, amarlo y servirlo, para hacer nuestros sus sentimientos (Flp 2,5) y convertirnos en otros “Cristos” para la Iglesia y para nuestro país, dejándonos traspasar de tal manera que lleguemos a experimentar las palabras del Apóstol Pablo, «Ya no soy yo quien vive, sino Cristo quien vive en mi» (Ga 2, 20).