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HOMILÍA DEL DÍA, Jueves 1 de Octubre- Por P. David Halm

P. David Halm

Jueves 1 de octubre de 2020

+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas   10, 1-12

El Señor designó a otros setenta y dos, además de los Doce, y los envió de dos en dos para que lo precedieran en todas las ciudades y sitios adonde Él debía ir.

Y les dijo: “La cosecha es abundante, pero los trabajadores son pocos. Rueguen al dueño de los sembrados que envíe trabajadores para la cosecha. ¡Vayan! Yo los envío como a ovejas en medio de lobos. No lleven dinero, ni provisiones, ni calzado, y no se detengan a saludar a nadie por el camino.

Al entrar en una casa, digan primero: "¡Que descienda la paz sobre esta casa!" Y si hay allí alguien digno de recibirla, esa paz reposará sobre él; de lo contrario, volverá a ustedes. Permanezcan en esa misma casa, comiendo y bebiendo de lo que haya, porque el que trabaja merece su salario.

No vayan de casa en casa. En las ciudades donde entren y sean recibidos, coman lo que les sirvan; sanen a sus enfermos y digan a la gente: "El Reino de Dios está cerca de ustedes". Pero en todas las ciudades donde entren y no los reciban, salgan a las plazas y digan: "¡Hasta el polvo de esta ciudad que se ha adherido a nuestros pies, lo sacudimos sobre ustedes! Sepan, sin embargo, que el Reino de Dios está cerca".

Les aseguro que en aquel Día, Sodoma será tratada menos rigurosamente que esa ciudad”.

Palabra del Señor.

Homilía del Día

Escribió Santa Teresa del Niño Jesús que “Mi alegría es ser pequeña, permanecer pequeña, así, si alguna vez en el camino caigo, me levanto enseguida, y mi Jesús me coge de la mano”. 

Hay tantas razones que la Iglesia le nombró a Marie-Françoise-Thérèse Martin de Lisieux como doctora de la Iglesia en 1997. Entre ellas son sus escrituras y meditaciones, su ejemplo de caridad, y su vida religiosa– aún corta en la tierra. Pero sobretodo fue su “caminito”: una vida marcada por su humildad y deseo de vivir “pequeña” y practicar “las virtudes pequeñas.” Lo realizó y en esto vemos la contradicción aparente, que esta mujer tan comprometida vivir oculta y pequeña ¡ahora es la cuarta doctora femenina en la historia entera de la Iglesia Católica! (con Catalina de Siena, Teresa de Jesús, y Hildegarda de Bingen)

Nos parece una contradicción hasta que recordemos que Jesús nos dijo “quien se haga pequeño como este niño, ése es el más grande en el Reino de los cielos”. Teresita lo sabía y lo vivía. Nos parece tan obvio, pero sabemos que es tan difícil ¿Porque?

Clave, creo yo, es que leamos de nuevo su frase arriba: “si alguna vez en el camino caigo, me levanto enseguida, y mi Jesús me coge de la mano”. ¿Cómo aprenden los niñitos caminar? En el principio se levantan con piernas temblorosas, toman dos o tres pasos y se caen ¿cierto?

¿Y que hacen después? ¡Lo hacen de nuevo! Los niñitos no tienen vergüenza de caer ni planificar una estrategia. Simplemente lo hacen y cuando se caen se levantan enseguida. Sabemos que la base de eso es su confianza que están allí su mamá o papá para levantarlo si necesario y siempre cuidándolo.

Teresita del Niño Jesús tenía esa confianza que Jesús estaba siempre con ella y ella vivió su vida con toda la confianza santa de una niñita en su mamá. Que vivamos en la misma manera de su caminito ¡ser pequeños y mantener nuestra plena confianza en Jesús!

Fr. David Halm

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